miércoles, 3 de enero de 2007
Piedra de Luna
Se la conoce también con los nombres de Piedra Lunar y "adularia". Es una de las variedades más valiosas del feldespato, uno de los minerales más abundantes de la Tierra. Puede presentar una amplia gama de colores y todas poseen un resplandor azulado o blancuzco denominado "adularescencia" que tanto cautivó a nuestros antepasados y todavía hoy sigue seduciendo a quien la admira y posee. Se piensa que tiene una facultad muy especial.
Tal vez es la única piedra capaz de captar los estados de ánimo de las personas y las energías que impregnan un ambiente determinado y manifestarlo cambiando ligeramente de matices. Si la energía que desprende la persona con la que está en contacto es positiva, la Piedra de la Luna siempre muestra unas tonalidades azules o violetas mucho más intensas, con más luminosidad y viveza. Si la energía que desprende la persona es negativa, la Piedra de la Luna pierde su brillo intenso y su luminosidad y se oscurece hasta adoptar unas tonalidades más grises o pardas.
Cuanto mayor es el resplandor azulado o violeta de la adularia, mayor es la energía positiva que desprende la persona con la que está en contacto. Lo mismo sucede con los ambientes. La adularia es capaz de cambiar sus tonalidades y luminosidad dependiendo del ambiente en el que se encuentre. A mayor energía positiva del entorno mayor luminosidad y colorido.
En algunos lugares se la denomina "piedra de la madre tierra" porque protege contra la esterilidad y las dificultades del parto haciendo que las mujeres sean fértiles y los nacimientos felices. En el pasado se la conocía también como "piedra del viajero" y era utilizada como amuleto protector por todos aquellos que tenían que realizar un viaje inseguro y no exento de peligros. De ella se dice también que otorga poder para leer el futuro si se coloca en la boca durante la luna llena y constituye una de las gemas predilectas para inducir trances. Hay quienes la utilizan para evitar la obesidad y parece ser un amuleto bastante utilizado contra el egoísmo. Posiblemente la afirmación más extravagante que se ha hecho de la Piedra de la Luna es aquella que dice que vuelve famoso e invisible a su portador.
A causa del calor en las zonas de aguas termales las soluciones minerales se transforman, dando lugar a la adularia. Por este motivo, es un mineral que suele encontrarse en grietas de tipo alpino, donde se asocia, entre otros, con cuarzo, moscovita, biotita, granate o turmalina. Se han encontrado grandes cantidades de adularia en los Alpes suizos y austríacos, en Bolzano (Italia) o en la isla de Elba.
La adularia es un mineral cristalizado que forma prismas alargados o aplanados. También puede encontrarse formando rombos unidos entre sí. Las estructuras que forma entonces se denominan maclas.
Los cristales de la adularia suelen ser estriados, transparentes o blanquecinos, con una pátina verdosa. Son ligeros y frágiles y presentan una gran resistencia al calor del fuego. El único ácido que puede atacarlos es el fluorhídrico.
Formula: KAlSi3O8
Sistema: Orthorhombic
Nombre: De los montes Adula
Technorati tags: Piedra de Luna, Adularia.
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