Había una vez un conejo enamorado de la Luna. Cada vez que la Luna aparecía, él la esperaba frente a su cueva y le decía:
—Amiga Luna, ¿por qué no bajas para llevarme contigo allá arriba?
—No puedo —contestaba la Luna— aunque tus intenciones son buenas.
El conejo se lo pedía tanto que un día la Luna bajó al lago donde el conejo iba todos los días a tomar agua. Cuando el conejo llegó a la orilla la miró y le dijo.
—Amiga Luna, ¿ahora sí me puedes llevar al cielo para estar contigo?
—¡Te llevaré! —contestó la Luna—. Pero si en el cielo te da miedo te dejo caer.
—Está bien. Acepto.
Entonces el animal se subió a la Luna. Es por eso que miramos al conejo que está con la Luna en el cielo.
Recopilador: Leobardo Guevara M.
Comunidad: Fincas Viejas, Mpio. de Tecpan de Galeana, Guerrero.
Me á gustado, mucho, la histório, de tu conejo en la luna . Gracias e abraços amigos.
ResponderBorrarAna rapunzel
esta de poca esa historia y eso de la luna es cierto barda
ResponderBorraresta chula la luna porque ay 5 diferencias
ResponderBorrarveda ana licia porque no escribíste nada
ResponderBorrarqueca mana sisisisisisisisisisisisisisi
ResponderBorrarque onda esta que arde de lo chilo mano sisisisisisisisisisisisissisisisisisisisisisisisisisisissisisisisissisidsisisisisisisiiiiiiiiiiiiii
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